El Nuevo Modelo Educativo propuesto por la Secretaría de Educación Pública reorganiza los principales componentes del Sistema Educativo Nacional para que los estudiantes logren los aprendizajes que actualmente son requeridos y puedan formarse de manera integral en el mundo del siglo XXI. En este sentido, el planteamiento pedagógico establece una nueva visión que pone la Escuela al Centro del sistema educativo, como espacio en donde convergen todos los recursos y esfuerzos de los distintos actores. Bajo este enfoque, las comunidades escolares progresivamente desarrollarán las capacidades que les permitan ejercer una mayor autonomía que impulse los aprendizajes de los estudiantes.

El modelo busca crear una escuela renovada y fortalecida que cuente con una organización, acompañamiento y servicios que conviertan las aulas en auténticos espacios de aprendizaje. De la misma manera maestros mejor preparados son clave para construir interacciones educativas significativas, con creatividad e innovación, con el fin de estimular a sus alumnos a alcanzar los aprendizajes esperados.

Otro objetivo del modelo consiste en sentar las bases para que los centros escolares fomenten el trabajo colaborativo y colegiado, el aprendizaje entre pares y la innovación. El nuevo enfoque busca impulsar, a partir de la ruta de mejora institucional, la planeación estratégica y la evaluación para el desarrollo continuo, así como el uso efectivo del tiempo en las aulas y la creación de ambientes propicios para el aprendizaje.