Ciudad de México a 25 de abril de 2013.- Es necesario el trabajo conjunto de maestros, pedagogos y matemáticos para mejorar de manera determinante la enseñanza de las matemáticas y, con ello, los resultados de nuestros niños y jóvenes en las pruebas nacionales e internacionales, expresó el Dr. Rodolfo Tuirán, Subsecretario de Educación Media Superior, durante el encuentro: ¿Hacia dónde va la enseñanza de las matemáticas?, que se realizó en El Colegio Nacional.
En este foro, coordinado por el Dr. Samuel Gitler, miembro de El Colegio Nacional, y en el que participaron también el Dr. José Antonio de la Peña, del Centro de Investigación de Matemáticas y el Dr. Carlos Bosch, del Instituto Tecnológico Autónomo de México, el Dr. Tuirán explicó que las pruebas estandarizadas que se aplican a los niños y jóvenes de nuestro país muestran que la mayoría de los alumnos no alcanzan un nivel suficiente de “alfabetización matemática”.
De acuerdo a los resultados 2009 de PISA (prueba que la OCDE aplica cada tres años a jóvenes de 15 años de sus países miembros y que mide habilidades y competencias en matemáticas), México concentra poco más de la mitad de sus jóvenes en los dos niveles más bajos (de cuatro posibles), lo que significa que no están preparados para realizar las actividades que exige la vida en la sociedad actual.
Respecto a los resultados de la prueba Enlace (que aplica la Secretaría de Educación Pública a niños y niñas desde tercero de primaria a tercero de secundaria y a jóvenes del último año de educación media superior), el Subsecretario destacó que a pesar de registrarse una mejora en los resultados de 2012, prevalecen los bajos niveles de logro en matemáticas tanto en primaria y secundaria, como en bachillerato. Precisó que alrededor del 55% en 6° de primaria, cerca del 80% en 3° de secundaria y casi el 70 % de los alumnos en 3° de bachillerato se encuentran en los niveles “insuficiente” y “elemental” de esta prueba.
El Dr. Tuirán concluyó que los resultados de la Prueba Enlace sugieren numerosas áreas de oportunidad cuando se examinan sus diferentes áreas temáticas. Es necesario, dijo, reforzar programas, contenidos y materiales, encauzar los esfuerzos didácticos para corregir deficiencias, introducir prácticas pedagógicas innovadoras centradas en la comprensión y no en la memorización o mecanización, así como formar y capacitar a los docentes para dominar los contenidos y aprovechar las múltiples facetas de la disciplina.
Por su parte el Dr. Carlos Bosch dijo estar convencido de que el elemento central de la educación son los maestros; por lo tanto, para avanzar en la enseñanza de las matemáticas, es indispensable que los propios planes de estudio con los que son formados los docentes consideren más cursos de formación y contenido matemático, no sólo pedagogía de las matemáticas. El Dr. Bosch refirió a algunas estrategias valiosas que instrumentan otros países latinoamericanos con buenos resultados, como el caso de Brasil, Cuba, Chile y Argentina.
El Dr. José Antonio de la Peña, destacó que a pesar de la inversión que México realiza en educación no se obtienen los resultados deseados, y para lograrlos no hay fórmulas mágicas. Hizo hincapié en la necesidad de dar continuidad a las reformas en curso en los distintos niveles educativos y a aquellos programas que buscan atender las deficiencias estructurales del sistema educativo en México.
También destacó que las matemáticas suelen ser un indicador inequívoco del aprendizaje de los alumnos, pues si a un alumno le va bien en matemáticas, seguramente, le irá bien en el resto de las materias.
Por último el Dr. Gitler, ganador del Premio Nacional de Ciencias en 1976, enfatizó la importancia de profesionalizar la labor docente, y especialmente la formación que reciben los profesores en las escuelas normales, ya que serán ellos quienes tendrán a su cargo la enseñanza en las aulas de educación básica.